El sábado, en la inauguración del Encuentro, las heridas por la feroz represión que sufrieron tres días atrás los originarios wichis y qom junto a los criollos, todavía estaban muy a flor de piel entre los anfitriones, quienes acampaban en el Parque 2 de Febrero, desde el martes. “Fue una cacería, nos vigilaban desde una avioneta como en la matanza de Napalpí”, evocaban indignados.
El sábado, en la inauguración del Encuentro, las heridas por la feroz represión que sufrieron tres días atrás los originarios wichis y qom junto a los criollos, todavía estaban muy a flor de piel entre los anfitriones, quienes acampaban en el Parque 2 de Febrero, desde el martes. “Fue una cacería, nos vigilaban desde una avioneta como en la matanza de Napalpí”, evocaban indignados.
Con el correr de las horas del sábado, las delegaciones de todo el país iban sumándose con sus plásticos, carpas y fogatas alrededor de las cuales comenzó a discutirse “qué hacer y cómo” para enfrentar la política represiva en las provincias; para defender las tierras ancestrales contra los megaproyectos vinculados a los extranjeros y socios nativos; para hacer cumplir las leyes que escribió este Estado que es el primero que las viola.
Las balas de goma, los garrotazos, las heridas de los hermanos chaqueños no menguaron la voz de los que hoy sufren la falta de agua, de tierra, de apoyo a la producción, el hambre, la falta de atención en salud, educación, etc. Alrededor del mate y del fogón, se murmura bronca y odio contra un gobierno que trata con saña a los originarios. Esa bronca tiñó el Encuentro y acrecentó la necesidad de enfrentar con todo la política represiva y de judicialización que aplica el gobierno ante estos reclamos.
El sábado por la tarde, el Encuentro quedó inaugurado, tras una extensa apertura que contó con los saludos de todas las comunidades presentes con sus lenguas, sus costumbres, su espiritualidad y colores. Allí quedó demostrada la diversidad y a la vez el respeto por el otro, en comunión, que culminó con la ronda de encendido del fogón, alrededor del cual fueron expresando los deseos para el Encuentro y el pedido a los ancestros para guiar en la discusión sobre cómo encontrar soluciones al problema de la tierra, trabajo y acceso a la educación y la salud. En las expresiones y en la memoria durante estas jornadas, estuvo la permanente evocación de Mártires López, quien es ejemplo de lucha para los pueblos originarios.
Unidad fue la palabra clave del encuentro. Unidad en el interior de las comunidades y entre todas para enfrentar la política del gobierno de Cristina Kirchner en las provincias. Unidad de las mujeres para denunciar el método de algunos caciques que terminan trabajando para el gobierno; y unidad para salir a la ruta -como las 700 mujeres wichis de Mosconi, Salta, que se rebelaron a los caciques y a sus hombres por seguirlos, cuando supieron que estaban reprimiendo a sus hermanos en Chaco.
Unidad, para tener acciones en común, para hacer cumplir las leyes existentes, para que no nos corran de nuestras tierras. Unidad, para sacar a las petroleras que con sus métodos no convencionales nos quitan el agua en Chubut y Neuquén. Unidad, para hacer posible vivir en nuestras tierras, y vivir de lo que de ella nace.
TALLERES
A lo largo de la tarde del sábado y durante el domingo se llevaron a cabo cinco talleres donde se discutieron problemas específicos para llevar las propuestas al plenario de cierre.
Participaron de las jornadas originarios provenientes de: Capital Federal, provincia de Buenos Aires, La Pampa, Río Negro, Neuquén, Chubut, Misiones, Corrientes, Salta, Misiones y Chaco.
Mujeres Originarias
“Venimos poniéndonos de pie tras más de 500 años de opresión, explotación, despojo y discriminación que se hicieron insoportables. Por eso decimos ¡Basta!”, se expresó en sus conclusiones del taller de mujeres, que este año fue enorme y emotiva su participación. En sus intervenciones, muchas hasta las lágrimas, expresan lo más crudo de la opresión en un país como la Argentina. Son las que se rebelan y denuncian a los hombres y a los caciques que se dejan seducir por los arreglos que algún puntero o funcionario público les haga, en contra de los intereses de sus propios hermanos. Cansadas de tantas mentiras, ellas quieren tomar el control, pasar al frente, porque son ellas las que paran la olla en la casa y viven la crudeza del hambre y el aumento descontrolado de los precios de los alimentos; ellas son las que denuncian y se organizan para enfrentar la droga que se mete en sus comunidades y destruye a sus hijos; y son ellas las que cada vez más comienzan a levantar su voz para salvar a sus familias y sus culturas ancestrales.
Jóvenes originarios
El taller, contó con una numerosa participación de mujeres. Allí se debatió la situación que viven los jóvenes con el hambre, la droga, la trata de mujeres. La migración de los jóvenes a las ciudades, la discriminación, la pérdida de sus lenguas y las costumbres en la escolarización.
Tierra y territorio
Fue uno de los talleres más numerosos, donde se denunció que la tierra y territorio que se entrega a las comunidades no son aptas ni suficientes para el desarrollo comunitario. Se denunció que los estados conforman organismos que sin consulta ni participación de las comunidades designan a los representantes, como por ejemplo el CPI (Consejo de Participación Indígena), el CCI (Consejo de Coordinación Indígena) donde opera La Cámpora, o el caso del Mowitob, armado por el gobierno de la provincia de Chaco para hacer negociado de tierras. Por otra parte se denunció que las comunidades cuentan con títulos muy precarios como “veinteañales”, comodatos y otras formas que no garantizan la posesión de la tierra y facilitan el despojo y el desalojo frente a los negociados de los gobiernos nacional y provinciales.
Ciudad y campo
Se discutió cómo las comunidades son forzadas a migrar a las ciudades, los desalojos que sufren, l a dificultad de volver a lo que fueron sus tierras ancestrales. Cómo se venden tierras con familias adentro y luego son desalojadas por los usurpadores socios del gobierno.
Estuvo en el debate cómo exigir la renuncia de los dirigentes corruptos porque la corrupción es un elemento clave y un obstáculo para la eliminación de la pobreza en las comunidades.
Personería jurídica
Se debatieron los pasos a seguir para completar las documentaciones para presentar ante el Renaci, y así conformar las comunidades, o en las que ya están conformadas, se debatieron las falencias en las tramitaciones.
Propuestas aprobadas por el plenario
- Organizar un encuentro solo de jóvenes originarios.
- Ayudar a compartir en las redes sociales la problemática de cada comunidad. Realizar un censo, por los propios originarios, para saber cuántos somos.
- Compartir en las redes sociales las leyes que nos avalan y no se respetan como las de territorios, educación y salud.
- Unidad multisectorial de originarios, obreros, campesinos, estudiantes, desocupados en paro nacional de 36 horas que enfrente la política de ajuste, entrega y represión del gobierno nacional y provincial.
- En Chaco: No a la entrega de tierra a los árabes para explotar. Respeto a la forma democrática a las decisiones de entrega de tierra. No a la Mowitob. Alerta nacional de los pueblos originarios y solidaridad con Chaco.
- Verdad y justicia para Mártires López.
- Repudio a la brutal represión del 4 de junio en Resistencia, Chaco, siendo esto una práctica sistemática de los estados Nacional y provincial para callar las demandas de nuestros pueblos. Nuestra más profunda solidaridad con nuestros hermanos.
La Plata, sede del 9° Encuentro
Al cierre del Encuentro se eligió la próxima sede, que será la ciudad de La Plata, donde viven varias comunidades originarias. En ese emotivo cierre el compañero Gumersindo, señaló que en La Plata todas las tierras son privadas, denunció “el avance de countries”, que “el precio de la hectárea es de 150 mil pesos, inaccesible para la mayoría” y que el gobierno no tiene programas para el migrante. Denunció que el INAI “no tiene recursos “solamente para relevamientos territoriales pero lamentablemente para nosotros tampoco existen estadísticas”.
Adhiriendo con emoción, la compañera Margarita Peñailillo, de Originarios en Lucha, se despidió emocionada y señaló la valentía “de los hermanos chaqueños en esta larga lucha”.
Finalmente, el compañero Víctor Gómez agradeció la solidaridad recibida de todo el país, afirmando que están siguiendo el camino marcado por el compañero Mártires López, quien “está presente entre nosotros”, destacando que “para vencer esa mano poderosa hay que unirse.
