“La presencia de Hugo Yasky en Cannes es todo un símbolo de su su- bordinación a las necesidades de la política del gobierno de CK, que lo requiere para mostrar a los trabajadores argentinos ante los poderosos del mundo en la cumbre del G-20.
“La presencia de Hugo Yasky en Cannes es todo un símbolo de su su- bordinación a las necesidades de la política del gobierno de CK, que lo requiere para mostrar a los trabajadores argentinos ante los poderosos del mundo en la cumbre del G-20.
“Pero más ilustrativa fue la foto en la que el ‘movimiento obrero organizado’ acompañaba a la presidenta, en la que ambos “dirigentes”, uno (Yasky) elegido como dirigente de la CTA por el voto de una sola persona (el ministro Tomada), y el otro (Gerardo Martínez, candidato a reemplazar a Moyano en la CGT quizás por los servicios prestados a la dictadura cuando era parte de los ‘servicios’), vestían elegantes trajes y corbata al tono con la magna ocasión.
Esta cumbre sirvió para que el pueblo y los trabajadores griegos sepan que los poderosos del mundo decidieron cargar sobre sus espaldas la crisis para escarmiento del mo-vimiento obrero que se atreva a luchar por sus necesidades.
No es la primera vez que con su foto paga las cuentas pendientes que tiene con los favores del kirchnerismo.
Paralelamente, la secretaria ge-neral de la Ctera, Stella Maldonado, su sucesora en el cargo, homenajeaba en el local de Chile 654 a Néstor Kirchner colocando dos placas por las leyes de educación y la paritaria y por “haber hecho posible que nuestros sueños se conviertan en realidad”, ante los ministros de Educación Sileoni y Oporto de la provincia de Buenos Aires.
No cuestionamos las adhesiones personales pero sí aquellas que se hacen en nombre de todos los docentes de Ctera. Cuestionamos la pérdida de la independencia de clase y de la autonomía de la Confederación.
Mientras se abrazaba al kirchnerismo se abandonaba y aislaba a las provincias que no se subordinan y luchan por las necesidades de sus docentes y de sus alumnos. Pese al discurso del gobierno, que se autoproclama la antítesis del menemismo, la política educativa kirchnerista ha mantenido los núcleos duros de la Ley Federal de Educación de Menem y Cavallo. Uno de estos núcleos es la fragmentación del sistema educativo.”
