El presidente de YPF puesto por Cristina Kirchner tras la expropiación del 51% a Repsol, Miguel Galuccio, presentará esta semana un “plan de exploración” para yacimientos no convencionales, y anda a la búsqueda de socios. Participó del Consejo de las Américas –reunión de empresarios y dirigentes organizada por la Embajada de EEUU– junto a los líderes de las principales empresas petroleras en Argentina y desparramó promesas. Allí empresarios como Eurnekian se comprometieron a invertir, pero por las dudas Galuccio ya informó que una parte del proyecto se financiará con… ¡sí, con fondos de la Anses!
Luego el CEO de YPF se reunió con el presidente para América Latina y África de la petrolera norteamericana Chevron, el iraní Ali Moshiri, empresa con la cual “avanzan con rapidez hacia un acuerdo estratégico”, según un comunicado de YPF, “para el desarrollo de petróleo y gas no convencional en el yacimiento Vaca Muerta, Neuquén”. Como si no fuera poco el halago hacia la empresa imperialista, Galuccio, luego de la reunión con Moshiri, se despachó con un “nosotros queremos socios con el peso y la experiencia de una compañía de esta talla mundial”.
Mucho más cerca del discurso menemista que de las aspiraciones del Gral. Mosconi, el presidente de YPF Galuccio, para delicia de su auditorio de empresarios, dijo que “Honramos las obligaciones y los compromisos que tenemos con nuestros accionistas”. Y remató “Necesitamos socios, y estamos abiertos a esos socios, están bienvenidos a trabajar en este país. Créanme que como líder de la empresa líder, yo voy a defender su inversión. Créanme que podemos crecer haciendo dinero”.
¿Los chicos de La Cámpora cantarán en los próximos actos de Cristina “de la mano de Chevron hacia la liberación”?