1. Ajuste con “sintonía fina” “Si no recurrimos a las reservas [del Banco Central], estamos obligados a un ajuste brutal”, confesó la presidenta de ese organismo, Mercedes Marcó del Pont, ante el Congreso de la Nación. 1. Ajuste con “sintonía fina” “Si no recurrimos a las reservas [del Banco Central], estamos obligados a un ajuste brutal”, confesó la presidenta de ese organismo, Mercedes Marcó del Pont, ante el Congreso de la Nación. Hay que leer bien lo que dijo. Sin manotear esas reservas el ajuste sería “brutal”; con esas reservas hay ajuste “con sintonía fina”, como dijo la presidenta. Esto quiere decir recortar primero $ 20.000 millones de los subsidios (para ir después el resto de los $ 75.000 millones). Ir paso a paso, y que los gobernadores e intendentes (convertidos en delegados del gobierno nacional) pongan la cara para los aumentos de tarifas, etc. Tarifazos, impuestazo y techo del 18% en los aumentos salariales de las paritarias, son la clave de la política K para que los trabajadores y el pueblo paguen la crisis. El gobierno, con el 54% de los votos, creyó ir rápido con la “sintonía fina”. Se equivocó. Dicen carteles en las marchas: “No la votamos para eso”. La caída importante en la imagen del gobierno expresa el crecimiento del malestar, la bronca y la lucha popular, más rápido de lo que creyó Cristina K, que le hace difícil al gobierno avanzar con el ajuste.   2. Preparar el paro nacional activo Muchas cosas acumulan malestar…