1. Disputa, factores de guerra y lucha popular El general Lloyd Austin, máxima autoridad militar yanqui, afirmó en un Foro de Defensa que China y Rusia “buscan un mundo en el que las disputas se resuelvan por la fuerza”. Dijo también que el presidente chino, Xi Jinping, realiza maniobras sobre Taiwán, “altamente provocativas”. Que Irán le provee drones a Rusia que matan a militares y civiles ucranianos y tienen fuerzas en Crimea para el manejo de estos drones. Además, se acerca a enriquecer uranio para armas atómicas. Y que Corea del Norte ya tiene misiles de largo alcance. Afirmó así que los esfuerzos de China para “remodelar” la región del Indopacífico, son el reto más importante que enfrenta en el campo de la seguridad. No dijo el milico yanqui que la OTAN, y en particular Estados Unidos, Inglaterra, Japón y otros imperialismos están multiplicando sus presupuestos militares, previendo una guerra. Crece la disputa imperialista y los factores de guerra. Pero también crecen las luchas populares. En China, las protestas estallaron por la muerte de diez personas en el incendio de un bloque de apartamentos en Xinjiang. Por la política de “Covid cero”, a los fallecidos se les habría impedido salir del edificio en llamas. Sus muertes provocaron una oleada de dolor y rabia. Muchas de las protestas son protagonizadas por estudiantes. Al menos 79 universidades de 15 provincias chinas organizaron protestas públicas de diversa magnitud. Se autodenominan “Revolución A4”: agitan papeles en blanco, mostrando su rechazo a la censura y…